Las arquitecturas cognitivas constituyen el sustrato de todas las funcionalidades cognitivas como la percepción, la atención, la selección de acciones, el aprendizaje, el razonamiento, etc. Desarrollar una arquitectura cognitiva para un robot autónomo es una tarea muy compleja, y el GII lleva desde el año 2000 centrado en esta línea a través del Mecanismo Cognitivo Darwinista (MDB), que ha dado lugar a numerosas publicaciones de revista y en actas de congresos internacionales a lo largo de estos años.